¡Herramientas lúdicas y adaptadas para desarrollar la motricidad fina!

Abrochar un abrigo, sostener un lápiz, recortar una hoja… Estos gestos cotidianos no son innatos, se aprenden poco a poco. Para algunos niños, especialmente aquellos con dispraxia, trastornos de coordinación, síndrome de Down o simplemente los más pequeños que están descubriendo sus capacidades, este aprendizaje requiere un acompañamiento específico y progresivo.

¡Con las herramientas adecuadas, cada movimiento se vuelve más fluido y cada progreso más motivador! A través del juego, los niños afinan su destreza, ganan confianza en sí mismos y desarrollan su autonomía a su propio ritmo.

Descubre nuestra selección de juegos y herramientas ergonómicas para acompañar a cada niño en la exploración de sus habilidades.